Uno de los métodos más efectivos y seguros para adelgazar en personas con obesidad es el balón gástrico, porque permite la pérdida de peso sin cirugías y su colocación es realmente sencilla.

Con la ayuda de un endoscopio manejado por un especialista en Gastroenterología, se introduce por la boca un tubo por el que viaja un balón de silicona deshinchado que se libera en el estómago. Posteriormente, se rellena con una solución salina de azul de metileno. El objetivo es que el balón alcance el volumen necesario para que el paciente se sienta saciado y disminuya su ingesta calórica.

La colocación del Balón va acompañada de un paquete especial donde le proporcionaremos:

  • Evaluación por médico especialista, nutricionista, entrenador y psicólogo durante los 8 meses posteriores a su colocación para ayudarlo a adoptar nuevos hábitos de vida saludable y evitar la reganancia de peso.

  • Monitorización de su composición corporal a través de todo su proceso de pérdida de peso a través de bioimpendaciometrias (procedimiento para medir la masa corporal) mensuales

  • Atención por enfermería domiciliaria durante 3 días después de la colocación (3 veces al día para la colocación de medicación intravenosa e hidratación).

El acompañamiento de un equipo multidisciplinar experto que incluya un plan nutricional personalizado y un programa supervisado de actividad física incrementa la probabilidad de éxito y disminuye el riesgo de una ganancia posterior del peso perdido.

Buscamos mejorar la calidad de vida de las personas que padecen esta condición de forma rápida y eficiente, pero procurando cambios en los hábitos nutricionales y  modificaciones del estilo de vida.